Jugar la vuelta en casa, garantía de nada en esta Champions

Sólo el Benfica lo tiene algo más complicado. Suyo ha sido el resultado más ajustado de estos primeros cuatro partidos de los octavos de final de la Champions.

El Benfica ganó por un escueto 1-0 al Borussia, pero al menos no encajó, una gran ventaja a la hora de viajar a Dortmund, aunque sin duda deberán emplearse a fondo para mantenerla.

No se puede decir lo mismo del resto de visitantes. Lo de jugar la vuelta en casa puede que no funcione para Barcelona, Nápoles y Arsenal.

Los primeros cayeron con estrépito en París ante el PSG, por cuatro goles a cero. El castigo a los 'gunners' ha sido aún mayor por parte del Bayern, que les ha goleado 5-1.

Barça y Arsenal necesitan el mismo resultado para seguir vivos, un 4-0. Ese marcador forzaría la prórroga en el Camp Nou y daría el pase en el Emirates, pero a la vista de los partidos de ida, es una verdadera quimera.

Entre el blanco y el negro de estos resultados tenemos el 3-1 del Madrid-Nápoles. A priori, positivo para el conjunto blanco. Son dos goles de ventaja, que se convertirán en tres si logran marcar en San Paolo.

Pero claro, un 2-0 les manda a casa en octavos, como hace años que no ocurre. No lo tiene el Madrid tan difícil como el Benfica, pero no debería confiarse.

Aún quedan otros cuatro partidos. ¿Seguirán el guión establecido que da una cierta ventaja al que juega la vuelta en casa o serán goleadas como casi todos estos partidos?