"No estoy orgulloso de lo que pasó, me vino un buen chaparrón. Una situación que no había vivido y que me vino de sopetón. Todo fue muy rápido, con muchas pulsaciones. Pedí perdón, él me explicó lo que había sentido", recordó angustiado en una entrevista para 'El Larguero'.
Asimismo, Kepa Arrizabalaga quiso enfatizar en su discurso y subrayó que, pese al revuelo mediático, la sangre no llegó al río: "Internamente, quedó finiquitado al día siguiente. Fue una situación desagradable, pero salimos de buena manera y a partir de ahí hicimos un gran final de temporada".
Entretanto, el guardameta esquivó las preguntas sobre el Real Madrid: "Se habló demasiado, tuve meses en los que me veía prácticamente todos los días en los medios de comunicación. Llegaba al final de contrato, entraba en un periodo en el que era libre para escuchar a cualquier club. Escuché a varios clubs importantes de Europa, luego decidí renovar".
"Obviamente, cuando renové no tenía en mente que a los seis o siete meses iba a venir el Chelsea con 80 millones y que iba a salir. Son momentos no de dudas, pero sí en los que voy encontrando más o menos el camino que voy a llevar en la vida deportiva. Cuando tomas una decisión que marca tanto, necesitas tiempo", sentenció.