El deseo de reforzar la portería de la directiva del Real Madrid se hizo realidad tras los intentos de David de Gea y Kepa Arrizabalaga. La oportunidad de fichar a Courtois, consagrado entre los mejores porteros del mundo tras su buen Mundial con Bélgica y la progresión protagonizada en el Chelsea, por una escasa cantidad aprovechando que solo le restaba un año de contrato con el club londinense, no la dejaron escapar.
El buen rendimiento de Keylor Navas, acostumbrado a convivir con el rumor eterno desde que tomó el relevo como titular de Iker Casillas, no frenó el deseo del club de aumentar la competencia. El rol de Courtois será diferente al de Kiko Casilla, al que se le busca una salida en los últimos días de mercado, y el pulso comenzará este domingo en la primera jornada liguera.
La final de la Supercopa de Europa fue para Keylor. Estaba recién llegado Courtois, en una semana de emociones tras cumplir su deseo de fichar por el Real Madrid y regresar a la capital de España para estar cerca de sus hijos. Sin competir desde el 14 de julio y con muy pocos entrenamientos en sus espaldas. Julen Lopetegui no dudó. Ni se vistió el belga.
Pero nadie esperaba que a los 50 segundos del primer partido oficial del curso, Keylor ya encajase su primer tanto. Mucho menos que con los dos de la prórroga, cerrase una final recibiendo cuatro dolorosos goles en cinco disparos a puerta. Solo respondió a un cabezazo blando de Godín.
En una sola ocasión en los cuatro años que ha cumplido en el Real Madrid, Keylor encajó cuatro goles en un partido. Fue ante el Barcelona, en un 0-4 en el Santiago Bernabéu en la 2015-16. En todos estos años recibió tres tantos en siete ocasiones, frente al Legia y Juventus en Champions; y Las Palmas, Barcelona en dos ocasiones, Betis y Girona en Liga.
Desde su llegada a España, solo en dos ocasiones había recibido más de tres goles en un partido. Una vez en su etapa con el Albacete (4-2 frente al Xerez) y otra con el Levante, donde dio el salto de calidad para llegar a un grande (7-0 contra el Barcelona).
El debate ya no tendrá freno y Lopetegui debe decidir ahora quien es su portero titular, con la opción de repartir competiciones entre Keylor y Courtois, además de manejar el aspecto psicológico. Perder su posición en la primera jornada liguera y tras recibir cuatro goles en el primer título perdido de la temporada representaría un nuevo examen a la fortaleza mental del guardameta costarricense.