Por las venas de Kiko Narváez corre sangre rojiblanca. El ex delantero es un icono de la historia del Atlético de Madrid, pero ha recibido una serie de críticas por un sector de la afición 'colchonera' después de colocarse una camiseta del Real Madrid por una campaña del programa 'Informe Robinson'.
El objetivo era fomentar la rivalidad sana en el fútbol, pero Kiko ha tenido que callar a los críticos que le salieron con una buena dosis de realidad para demostrar que tuvo, tiene y tendrá el corazón rojiblanca.
"Llegué a jugar los 3 años con el ligamento parcialmente roto y jugar gratis en el año que bajaron a Segunda División", escribió en sus redes sociales.
Pero Kiko Narváez exlotó en su cuenta oficial de Instagram y escribió un párrafo refiriéndose a todos los mensajes que le habían llegado tras vestirse con el color blanco del rival.