Después de varios tumbos en el Castilla, Samuel Eto'o debutó como jugador del primer equipo del Real Madrid con 17 años y su rendimiento sorprendió al Mallorca, que no dudó en pagar 7,2 millones de euros para llevarle a Son Moix.
El rendimiento del camerunés fue creciendo a una velocidad de vértigo hasta convertirse en el máximo goleador de la historia del club balear, coronando su etapa en la isla con la Copa del Rey conquistada en 2003 gracias a su doblete.
En 2004, el FC Barcelona se rascó el bolsillo para llevarle al Camp Nou, ante la mirada atónita de un Real Madrid que tenía derecho de tanteo pero no pudo firmarle porque Roberto Carlos, Walter Samuel y Ronaldo Nazario llenaban el cupo de extracomunitarios.
Años después, en 2007, Borja Valero formó parte de la fuga de talento del Castilla que llevó gratis a Juan Mata al Valencia. El centrocampista, también a coste cero, aterrizó en Son Moix y, de la mano de Gregorio Manzano, se ganó su traspaso a la Premier League.
Este verano, Takefusa Kubo llegó al Real madrid erigido en uno de los futbolistas jóvenes con más talento del ecosistema fubolístico. El conjunto blanco le ganó la partida al FC Barcelona, que le había forjado en La Masia, pero finalmente ha optado por buscarle una cesión para que no se estanque en el Castilla.