Primer año del VAR y la tecnología se ha convertido en protagonista indiscutible de la temporada. En algunos casos para bien, en otros para mal...
En el Athletic-Getafe de la anterior jornada, sin ir más lejos, el VAR no hizo acto de presencia. El partido iba 1-1 y era el último minuto de juego.
Jaime Mata cayó en el área por un agarrón claro de un jugador del Athletic. El árbitro pitó el final sin comprobar siquiera las imágenes en las que se veía claramente el penalti sobre el jugador azulón.
Fue la gota que colmó el vaso. La hinchada del Getafe se enfadó (con razón) y organizó una pitada contra el VAR.
El sábado, contra el Espanyol, el Coliseum Alfonso Pérez mostró su desacuerdo contra el uso que se le está dando al VAR. No entienden que, habiendo tecnología para comprobar las imágenes in situ, el colegiado de ese partido decidiera pitar el final del encuentro, privándoles de un penalti que podría haberles dado los tres puntos.
En el minuto 12 del Getafe-Espanyol, la hinchada dedicó una sonora pitada y sacó sus pañuelos en señal de protesta. "Hasta los h****, estamos hasta los h****", cantaron los azulones durante un minuto.
El VAR sirve para hacer el fútbol mucho más justo, pero la afición del Getafe reclama que se use cuando debe. En el Athletic-Getafe quedó claro que falta aún mucho por mejorar...
2 de diciembre de 2018