El infierno vivido por Fabio Quagliarella en los últimos años va finalizando poco a poco. El último detalle para la redención definitiva vino con el perdón de la hinchada del Nápoles a un jugador que fue criticado e insultado en su estancia en el equipo partenopeo.
Los napolitanos no le perdonaron a Quagliarella su marcha a la Juventus, aunque posteriormente se supo que dejó el equipo por el chantaje que estaba viviendo en Nápoles.
"Me amenazaron de muerte y me acusaron de pedófilo... ¡viví un infierno!", dijo el internacional italiano en relación a la pesadilla vivida, en tanto que la afición del Nápoles respondió en el choque ante el Crotone con este sentido mensaje: "En el infierno que has vivido, enorme dignidad. Nos volveremos a abrazar, Fabio. Hijo de esta ciudad".
De Laurentiis tuvo que vender a Quagliarella por las cartas anónimas y los mensajes telefónicos recibidos, algo que ahora se demostró totalmente falso.
Quagliarella continuó su carrera sin éxito en la Juventus, para recalar en la Sampdoria, club en el que actúa ahora mismo.