El Villarreal B dejó en la cuneta a un aguerrido rival como el Fuenlabrada y se jugará el ascenso a Segunda División en la final, una categoría de la que el hermano menor del 'submarino amarillo' se despidió en 2012 tras el descenso del primer equipo.
Ante los madrileños, el Villarreal B aprovechó la mayor calidad individual de algunos de sus hombres para doblegar la mayor veteranía y el saber estar del Fuenlabrada.
Los castellonenses se adelantarían mediada la primera parte en una acción en la que de nuevo Samu demostró que está llamado a enormes cotas. El nigeriano recibió y, con dos toques, la puso en la escuadra de Pol. Tremendo latigazo para adelantar a su equipo y despertar a un Fuenlabrada que salió a contemporizar y a buscar un tanto con el paso de los minutos. Ya en Bilbao había sido decisivo para los suyos en el choque ante el filial rojiblanco.
El gol no cambió demasiado el decorado del partido. Los madrileños llegaban con cuentagotas a la contra y se salvaban por el poco acierto que mostró en todo el partido un jugador con peso en el primer equipo esta temporada como Raba.
Tras el descanso, el partido siguió pendiendo de un hilo. Ambos equipos acumulaban ocasiones y Fran García estuvo cerca de hacer el 1-1, pero también Raba perdonó en un gran contraataque.
La puntería del joven jugador del Villarreal B acabaría por afinarse en su única acción determinante del partido. Recibió en el área y, tras una bonita pisadita, batió a Pol, que se había vencido hacia el otro lado.
El 2-0 ya sí que obligaba al Fuenlabrada a marcar dos tantos y los madrileños se pusieron el mono de trabajo. Conectaron dos ex Primera como Quero y Arruabarrena, entrados en la segunda mitad, pero Ander salvó al Villarreal B con un paradón antológico.
Los últimos minutos no tuvieron demasiada historia, pues el equipo de Miguel Álvarez no sufrió demasiado y certificó una clasificación a la final por el ascenso un tanto sorprendente ante uno de los mejores equipos de la temporada en Segunda B.