Vinícius Junior fue protagonista en el pase de Flamengo a la final de la Taça Guanabara, firmando un soberbio golazo desde la frontal que encendió a la parroquia visitante.
Más allá del tanto, la afición de Botafogo le recriminó la celebración, interpretando que el futbolista del Real Madrid se llevó las manos a la cara para llamarles llorones.
El gesto fue reprimido por los jugadores rivales durante el partido y en las redes sociales, donde incluso Neymar salió a defenderle tras el linchamiento mediático.
Sin embargo, Botafoto ha ido un paso más allá y se ha negado a ceder su estadio para Flamengo y Boavista disputen la final de la Taça Guanabara.
12 de febrero de 2018