Christian Benteke ha sido declarado como transferible al no entrar en los planes de Klopp para el próximo curso, pero su venta no es una prioridad.
Hasta ahora. Si llegase Mané, el belga sobraría. El dinero de su ficha se invertiría en la del nuevo fichaje, y con su venta el Liverpool espera compensar un poco el desembolso de casi 40 millones que se especula que pagará por el hasta ahora futbolista del Southampton.