La magia de Ronaldinho sigue intacta. Dio un gol y una asistencia en el Partido por la Paz, algo que para los presentes al estadio de Querétaro fue todo un verdadero honor.
El brasileño volvió a la que fue su casa por una buena causa y correspondio con destellos de su clase, que todavía sigue intacta. Una vez que dio su recital, Ronaldinho abandonó el césped y el público lo despedió con una atronadora ovación.
Ronaldinho sale entre ovaciones de la Corrrgidora. El astro se fue directo a los vestidores @fanaticosportv pic.twitter.com/mhkpoYutCN
— Fer Martínez (@futfer13) 12 de noviembre de 2017