Ya es oficial: el Mónaco puede respirar tranquilo. Temporada nefasta del conjunto del principado en la que no ha salido absolutamente nada y en la que coquetearon con el descenso hasta la última jornada.
Última jornada en la que volvieron a perder. A pesar de todo el Mónaco salió a morder, buscando un gol que le diese la tranquilidad desde los primeros compases.
Fàbregas tuvo la primera gran oportunidad cuando un remate suyo se estrelló en el travesaño. Gelson Martins no pudo definir un mano a mano y Falcao falló lo que nunca suele fallar.
El Niza, ante los fallos monegascos, se fue agrandando en el encuentro. Aunque el primer tanto no llegó gracias su trabajo. Fue Badiashile el que empujó el cuero a su propia portería en un centro sin peligro.
En la segunda mitad, el conjunto local comenzó a atacar con más ahínco. Benaglio fue el héroe y evitó varios goles hasta que cometió un penalti bastante infantil. Le Bihan fue el encargado de sellar el 2-0 definitivo.
Pese a la derrota, el equipo se aseguró su puesto en la Ligue 1 para la temporada que viene gracias a que el Caen, el único que le podía comprometer su estancia en Ligue 1, cayó en su casa ante el Girondins.