Pasaba el minuto 70 de encuentro, cuando Dixon Arroyo se llevó por delante a Diego Ribas, con una terrorífica entrada que acabó fracturándole el tobillo al vistoso centrocampista brasileño.
Flamengo y Emelec se medían en octavos de final de la Copa Libertadores, cuando el ex del Atlético de Madrid tuvo que abandonar el campo entre lágrimas y en camilla.
"Diego sufrió una fractura de tobillo izquierdo. Hay fractura ósea y lesiones ligamentarias. Requiere cirugía, ya que es considerada una fractura compleja", señaló Marcio Tannure, jefe del departamento médico de Flamengo.
No obstante, el dirigente del club brasileño no se atrevió a marcar un plazo de recuperación: "Se le realizarán exámenes complementarios para evaluar el alcance real de la lesión y programaremos su cirugía lo antes posible".