Larrea se entrevistó con el alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre; y el presidente de la Diputación, Elias Bendodo; con los que trató detalles de la organización.
El objetivo, según señalaron tanto De la Torre como Bendodo, es celebrar en Málaga un encuentro deportivo de primer nivel, para lo que es indispensable la colaboración institucional.
Tras esta reunión se informó de que las entradas tendrán un precio que rondará entre los veinte y los sesenta euros y de que se aplicarán descuentos tanto a paquetes familiares como a aficionados procedentes de otros municipios de la provincia de Málaga.
Además, como es habitual en cada partido que juega el combinado nacional, se instalará una zona de ocio para los aficionados en el centro de la ciudad, que se inaugurará el jueves 9 de noviembre por la tarde y estará hasta el mismo día del partido.
También se informó de que el entrenamiento del día antes del partido se desarrollará puertas abiertas en La Rosaleda y que los aficionados podrán asistir previa recogida de invitaciones.