Citando fuentes del Ministerio Público, el diario uruguayo El Observador publicó hoy que el acuerdo que el pasado 5 de febrero firmaron la Fiscalía y la defensa de Figueredo contempla que la condena que se le pedirá cumplir no superará los seis años de prisión.
No obstante, la información asegura que "la intención de la Fiscalía" es que Figueredo cumpla "el mayor tiempo posible de reclusión", en la cárcel o en un régimen de prisión domiciliaria.
Consultado por Efe, Juan Gómez, fiscal que hasta ahora se encargó del caso -fue sustituido recientemente por María de los Ángeles Camiño- y quien firmó el acuerdo con Figueredo, dijo que éste "es reservado" y que, por tanto, no puede confirmar ni desmentir que haya un compromiso de no pedir más de seis años de cárcel.
El acuerdo al que la Fiscalía llegó con el acusado la pasada semana estipula que Figueredo entregará distintos bienes procedentes de sus supuestas actividades ilícitas -los cuales ascienden a unos 10 millones de dólares- y que brindará información para que la Justicia pueda seguir avanzando en el caso.
El presidente de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) del país suramericano, Ricardo Pérez Manrique, dijo hoy que este tipo de acuerdos "son comunes" en muchos países.
"El fiscal, que es el dueño de la acción, puede como cualquier parte llegar a acuerdos, que en este caso se justifican por la ayuda para poder descubrir delitos que se suponen muy importantes", indicó.
"Es una facultad que el fiscal tiene de acuerdo a la ley, por lo cual, yo sobre si el acuerdo es conveniente o no es conveniente no me puedo pronunciar, pero es una facultad y está dispuesto en la ley", continuó el magistrado.
Figueredo fue procesado en diciembre de 2014 en Montevideo como involucrado en el llamado caso Conmebol, organismo del que fue vicepresidente de 1993 a 2013 y presidente entre 2013 y 2014.
El caso investiga una denuncia interpuesta a finales de 2013 por varios clubes uruguayos y por la Mutual de Futbolistas del país, que acusaban de la existencia en ese organismo de una "organización criminal" que se apropiaba de dinero destinado a clubes, jugadores y a la propia organización.
Figueredo también fue vicepresidente de la FIFA entre 2014 y 2015.