15 años y seis meses. Esa es la edad con la que Enes Sali marcó su primer gol en Primera con el Farul Constanza. Una edad en la que es más habitual salir con los amigos a tomar una hamburguesa que celebrar goles en la élite de una liga europea.
El chico milita en el fútbol rumano, a donde llegó de la mano del mítico Gica Hagi. El ex jugador es entrenador de un club que ha surgido de la fusión (orquestada por él mismo junto a Marica y Popescu) del Viitorul con el histórico Farul de la ciudad de Constanza, a las orillas del mar Negro.
Enes Sali entró en el descanso del encuentro ante el Academica Clinceni. El partido ya iba 2-0 para los locales, que ampliaron la cuenta hasta los cinco. Y el último fue el del jovencísimo atacante, que firmó una gran jugada en el 85'.
Sali arrancó desde su propio campo. Pegado a banda izquierda, dejó atrás a tres rivales mientras se encaminaba hacia la portería. Entre dos defensas, elevó una pelota que el portero solo pudo tocar, pero no evitar que se convirtiera en el gol que nunca olvidará el bueno de Enes.