Cualquier aficionado a la Eredivisie conoce el escudo y la indumentaria del Heerenveen. La camiseta la componen unas rayas azules y blancas con unos emblemas rojos y redondeados también presentes en el escudo. Pero no son corazones como se cree…
Estos símbolos que representan al Heerenveen son…nenúfares. Esta planta representa a la provincia de Frisia, a la que pertenece el club. Siete nenúfares pueden verse tanto en la camiseta como en el escudo.
Los siete nenúfares hacen referencia a las siete regiones neerlandesas que batallaron contra los pueblos vikingos en la Edad Media. No está probado ni siquiera que realmente fueran siete las regiones. De hecho sólo está probado que una fue Weser y otra, Alkmaar.
Además hay otra hipótesis sobre el número siete: los siete lagos de Frisia, la región que, como mencionamos anteriormente, alberga a la ciudad de Heerenveen. Incluso también tiene sentido las tres rayas blancas: las tres zonas que acogen los lagos de Frisia: Oostergo, Westergo y Siete Bosques.
De hecho, como dijimos anteriormente, al representar los nenúfares a la región frisona, también el modesto Blauhuster Dakkapel también presenta la planta acuática. El Heerenveen siente, como dice su apodo, ‘orgullo de Frisia’: en el Abe Lenstra suena el himno frisón antes de cada partido.
A lo largo de los años el Heerenveen, fundado en 1994, ha sido objeto de numerosas confusiones por los nenúfares presentes en su elástica, entendidos como corazones. De hecho, en Holanda solía ser un regalo típico de San Valentín cuando no tiene nada que ver con la festividad de los enamorados.
Un presente visto con ojos de ‘haberse pasado’ en los Países Bajos, donde ahora se suele regalar una flor o una tarjeta. Y ese día en Heerenveen, los nenúfares siguen clamando sin descanso lo que realmente son: nenúfares.