La IFAB ha matizado, para su aplicación a partir de la próxima temporada, aquellas normas del fútbol que han causado mayor controversia a lo largo del presente curso. Destacan las referidas a las manos y al VAR.
Se han aclarado los supuestos en los que hay infracción por mano. En caso de que el atacante toque el balón con la mano, si es fortuito solo se sancionará si la jugada acaba en gol o en ocasión manifiesta de gol.
En caso de que se trate de un defensor, la IFAB matiza que en caso de mano en una jugada de fuera de juego, esta se señalará si hubiera voluntariedad. También se aclara que será mano todo el brazo hasta la parte inferior de la axila.
Serán castigadas con amarilla las obstrucciones al saque, es decir, cuando un jugador esté a cuatro metros o menos de un balón parado. Y no se castigará la triquiñuela de devolverle el balón al portero con la cabeza o el pecho tras un saque de puerta, pero este deberá repetirse, por lo que la famosa jugada pasa a carecer de sentido.
Con respecto al lanzamiento de penaltis, la organización que rige las normas del fútbol también ha matizado varios supuestos. A partir de ahora si un portero se adelanta, pero es el lanzador quien falla el penalti, este no se repetirá. Y el cancerbero no será castigado.
Es decir, si el penalti se va fuera, pegando en el palo o no, no importará que el guardameta se hubiera adelantado, como no importa si en caso de gol los atacantes invaden el área antes del lanzamiento. Si el portero interviniera, tocando el disparo, sí sería sancionable.
Además, a partir de ahora la primera infracción del portero (siendo esta de adelantarse al lanzamiento la más habitual) dejará de conllevar amarilla. Será advertido por el colegiado, y solo le sancionará si reincide.
En caso de que portero y lanzador cometieran ambos infracción en el lanzamiento, se castigará al segundo, y nunca más al guardameta. Y, además, los jugadores llegarán 'limpios' de tarjetas a las tandas de penaltis.
La IFAB ha determinado que a partir de ahora las amarillas vistas durante el tiempo reglamentario y la prórroga no computen en la tanda de penaltis.
Es decir, si un portero llegase a la tanda amonestado y detuviese dos penaltis habiéndose adelantado en ambos, el árbitro le mostrará la amarilla por la segunda acción, pero no la roja salvo que cometiera una tercera infracción. Y en el acta las amonestaciones se reflejarán como sendas tarjetas amarillas, no como amarilla y segunda amonestación.
El VAR también ha tenido gran protagonismo en esta revisión. Se ha insistido en que solo habrá una señal de televisión para realizar la revisión, y que siempre que sea una jugada subjetiva el árbitro principal debe acudir al monitor a juzgar por sí mismo.
Y por último, la IFAB ha pedido a las competiciones que se ciñan al protocolo del VAR aprobado, mandando un aviso velado a la Premier League, la competición que más ha ido por libre a este respecto.
También ha insistido en que las conversaciones entre el colegiado y la Sala VOR deberán ser privadas, y no hacerse públicas ni ser facilitadas a los equipos, quizá la medida más controvertida de todas, habida cuenta de lo bien que le va a otros deportes que aplican la total transparencia a este respecto.