Desde el 20 de diciembre, Cuadrado no realice el protocolario saludo de cortesía previo a un encuentro, ya que lo vive desde uno de los asientos en el banquillo de la Juventus Stadium. Algo fuera de lo normal para lo que acostumbraba hace varios meses.
Según apunta 'Tuttosport', el extremo no convence a la directiva de la escuadra italiana, por lo que casi seguro rechazará comprar al jugador al final de temporada y menos por una cantidad que oscila entre los 20 o 25 millones de euros.
"El colombiano aún no ha podido ponerse en forma y no es el mismo que se admiraba cuando estaba en la Fiorentina", informa dicho medio.
En el próximo mercado de verano, el calor aumentará en la pugna que vivirán Juventus y Chelsea por el jugador. El primero por ceder su salida y el segundo por frenarla.