Una inflamación de los ligamentos de la rodilla hizo que Jordan Lukaku se perdiera el arranque liguero. El defensor de la Lazio no pudo jugar hasta el pasado 4 de noviembre, en el duelo de la jornada 11 ante el SPAL.
Lo hizo como suplente, entrando en el minuto 63 por Lulic. La pasada jornada, ante el Sassuolo, también entró desde el banquillo en el minuto 73. Y es que en el Stadio Olimpico quieren ser prudentes y no arriesgar.
Lukaku llegó al conjunto 'biancoceleste' en la temporada 2016-17 y desde primera hora se convirtió en uno de los titulares fijos. Tiene contrato hasta junio de 2019, pero los italianos ya estarían trabajando para ampliar su vinculación por varios años más.
Concretamente, según apuntó 'LaLazioSiamoNoi', hasta 2023. Un hecho que excluiría la llegada de jugadores para su demarcación en la sesión invernal de mercado.