Hablar de Wayne Rooney es hacerlo de uno de los futbolistas ingleses más exitosos de todos los tiempos.
El ahora jugador del Derby County ha tenido una larga y exitosa carrera en la que ha levantado numerosos trofeos y festejado una cantidad ingente de goles, pero no todo ha ido sobre ruedas para él.
Wayne, a lo largo de su trayectoria, ha tenido con cierta frecuencia distintos problemas por su adicción a la bebida, con el último caso sonado teniendo lugar en diciembre de 2018.
El que fuera estrella del Manchester United fue detenido por intoxicación pública e insultar a la policía mientras estaba en un claro estado de embriaguez.
Esa fue la gota que colmó el vaso de la paciencia de su mujer, Coolen Rooney, que desde ese momento decidió tomar cartas en el asunto.
Tal y como indica 'AS', la pareja del futbolista le impuso a Rooney una dieta y unos hábitos de vida sin bebidas alcohólicas.
Ello provocó, según la revista 'Heat', un cambio radical en el jugador, que tras varios meses de lucha parece haber dejado atrás sus problemas de adicción.
Ahora Rooney disfruta del fútbol y la vida sin estar atado a la bebida y ya toma de vez en cuando una copa de vino con total normalidad cuando sale a comer. Un gran logro que el ex internacional inglés debe a su inseparable esposa.