Según avanzaba la temporada, parecía claro que el Barça sería quien se llevara el gato el agua. Sin embargo, como bien dijo siempre Luis Enrique en rueda de prensa, la Liga seguía su curso y cualquiera podía dar la sorpresa.
Ya sólo quedan dos jornadas y seguimos sin poder apostar por uno de los tres. El equipo culé está a la cabeza de la clasificación con 85 puntos, exactamente los mismos que tiene el Atlético. El 'goal average' favorece a los catalanes. En tercera posición, el Real Madrid con sólo un punto menos.
Los merengues fueron los que dieron el pistoletazo de salida a la jornada 36 de Liga frente al Rayo. Bale salvó al Real Madrid ya en la segunda parte y pasó toda la presión a los rivales.
Después, le tocó el turno a los colchoneros. El Cholo decidió reservar a los habituales de cara al partido del Bayern. El partido pasaba y el gol no llegaba, por lo que Griezmann tuvo que saltar al terreno de juego. En un minuto, el francés dejó sentenciado el partido.
Por último, el Barça se la jugaba. Si perdía, la Liga estaba perdida. El equipo de Luis Enrique venció ante un Betis que se quedó con uno menos. Dos goles, uno de ellos por un clamoroso error de Adán, daban la necesaria victoria al Barça.
Así, quedan dos duras jornadas por delante para los tres de arriba. El equipo culé tendrá que medir fuerzas con el Espanyol, los colchoneros se batirán en duelo con el Levante y los merengues se la jugarán ante el Valencia.
Cada vez falta menos para conocer al justo vencedor de la Liga. ¿Quién será...?