El United-Tottenham iba camino del gatillazo futbolístico hasta que los 'red devils' se montaron en el Delorean y viajaron hasta los albores del fútbol inglés. Al más puro estilo británico, De Gea y Lukaku cocinaron un gol sazonado por Martial, héroe local en un encuentro para el olvido.
Mourinho, a pesar de conocer que el Tottenham no podía contar con Kane, planteó un envite cerrado, a expensas de una dosis de talento. Tres centrales para contener y Young y Valencia para dar opciones en banda. En el Tottenham, Son suplía al 'pichichi' Kane y Alli y Eriksen estaban llamados a poner la magia.
Ingredientes había de sobra, pero los cocineros de la pelota no tenían el día. Quizá el respeto al rival gestó una primera parte para borrar cuanto antes del disco duro. Nada de nada entre dos equipos que se limitaron a ser solidarios atrás y a buscar algún reducto en ataque.
Llegando casi al descanso, el cuadro de Pochettino tomó el mando y se asentó con el balón, aunque De Gea bien pudo sentarse a tomar el fresco. Tan sólo Alli, en un intento flojo y sin intención, hizo encender las alarmas de un United que tampoco propuso demasiado.
Paso al frente del United, partido enloquecido y héroe desde el banquillo
Necesitaba el choque algo de picante, también el público, que aguardaba noticias de los suyos bajo la lluvia. Afortunadamente, Mourinho decidió ir de frente a por su rival y el partido lo agradeció. Mkhitaryan, en el 55, disparó contra el palo de Lloris con Lukaku exigiendo el pase atrás.
Ahí todo cambió. Valencia probó suerte con un derechazo inapelable que rozó la escuadra, aunque fue Lukaku en el 74 el que hizo enmudecer a Pochettino. Gran centro desde la derecha y cabezazo imponente del belga. Lloris no llegaba de ninguna de las formas, pero ahí estaba el poste para hacer respirar al francés.
La lluvia caía con fuerza y la contienda tomó aires puramente británicos. En ese atractivo ida y vuelta, Dele Alli falló lo que la afición 'spur' ya cantaba como gol. Delicioso balón de Eriksen y mala decisión del inglés, que colocó mal su pie derecho cuando tenía todo a su favor.
A pesar de la locura final, fue en una jugada a pies quietos en la que el United certificó su victoria. Pelotazo de De Gea desde su área, peinada de Lukaku y gol al galope de Martial, que salió para eso. No pasó nada más, aunque el Tottenham murió volcado en el área de un United que mete presión al City.