Dos partidos amistosos saldados con un empate y una derrota para una Argentina que ha sabido sobrevivir sin Leo Messi. Los hombres de Scaloni demostraron estar preparados para el momento en el que el '10' no juegue más.
En un Martínez Valero con poca gente pero buen ambiente, Argentina y Ecuador se dejaron todo en el verde para la hinchada sudamericana que vive en España y que pudo ver a su Selección.
Pese a que el primer aviso lo dio Ecuador, fue Argentina la que mandó durante la práctica totalidad del encuentro. Y es que la 'Albiceleste' mostró buena parte de sus recursos en el verde.
ESPECTACULAR ACUÑA
Especialmente incisivo fue Marcos Acuña por la izquierda. El lateral del Sporting de Portugal quiso olvidarse de sus problemas en su club para ser un quebradero de cabeza para la defensa de Ecuador.
Por su banda llegaron los tres goles que Argentina marcó en la primera media hora de partido. El primero de ellos fue con asistencia del propio Acuña, que en un córner encontró la cabeza de Alario para abrir el electrónico.
Pero no quedó ahí la aportación de Acuña, el mejor de los de Scaloni. Buscó al propio Alario, se combinó con Lautaro y, en uno de los pases buscando al delantero del Inter, propició que Espinoza tocase el balón para que, sin querer, se marcase el segundo.
También fue determinante Acuña en la jugada del tercer tanto. El lateral volvió a llegar hasta línea de fondo y buscó un centro a Lautaro que acabó en penalti. Pese a que el 'neroazzurro' pidió tirarlo, apareció Paredes para discutirle el lanzamiento y marcar el tercero de los tantos.
REACCIÓN DE GASEOSA
Reaccionó Ecuador tras el paso por los vestuarios, pero su gol sería solo espuma ante el juego abrumador de Argentina. Se comió Marchesín una falta que botó Mena, nada más entrar al campo, para dar pimienta al partido.
Pero, en uno de los partidos más serios de la Argentina de Scaloni, la 'Albiceleste' impuso su marcha militar. Sentenció el partido con el centro de Dybala y el cabezazo de Pezzella.
Se unieron a la fiesta, en los últimos minutos, Domínguez con un tiro desde la frontal del área, y Ocampos, que marcó su segundo tanto en este parón de selecciones con un disparo casi sin ángulo.
Argentina demostró estar preparada para sobrevivir sin un Leo Messi que, sin embargo, podría volver en el próximo parón de selecciones. 5-1 y una sensación de superioridad para demostrar que está dispuesta a volver a lo más alto del fútbol mundial en Catar.