Con mucho sufrimiento, el Inter de Milán consiguió hacer los deberes y venció por 2-0 frente al Shakhtar Donetsk. Buen planteamiento de los ucranianos, aunque no pudieron materializar sus ocasiones y sucumbieron ante los locales, que si aprovecharon las suyas gracias a la pegada de Edin Dzeko.
Los visitantes llegaron al Giuseppe Meazza con pocas opciones, pero existía la esperanza de, al menos, clasificar para la Europa League. Sin embargo, el Inter no quiso dejar escapar su oportunidad de dejar prácticamente sellado el pase a octavos y saltó al césped con la clara intención de dominar.
El planteamiento de los italianos aguantó en el primer cuarto de hora, pero se tambaleó conforme los ucranianos se fueron metiendo en el partido. Poco a poco, el encuentro se fue convirtiendo en un golpeo constante entre los dos combinados. El primer aviso fue para Barella, que mandó el balón muy cerca de la escuadra con un disparo un tanto regular.
Aunque las ocasiones cayeron mayoritariamente a favor de los 'nerazzurri', la sensación en Milán era de intranquilidad. El Shakhtar atacó bien y defendió mejor. Para colmo, el posible 1-0, que llegó en el 24', no fue válido. Perisic vio portería, pero Darmian había deshabilitado la jugada al estar ligeramente situado en posición antirreglamentaria.
El nerviosismo aumentaba en cada minuto. El Inter chocó una y otra vez ante el muro ucraniano, que llevaba nombre propio. El guardameta Trubin paraba todo lo que llegaba a su portería, para desgracia de Lautaro Martínez, que lo intentó por activa y por pasiva. El argentino fue la viva imagen de la desesperación italiana, especialmente cuando su gol en el 57' fue anulado. Por fin batió al arquero rival, pero su falta en ataque hizo que el tanto no sumase.
Si bien el Shakhtar planteó una gran primera mitad y contó con ocasiones de peligro bajo la firma de Fernando, ofreció una cara distinta en la segunda parte. El vigente campeón de la Serie A volvió a dominar tras el descanso y, esta vez, no desperdició sus opciones.
La victoria del Inter se debió, en gran parte, al buen partido que desempeñó Edin Dzeko. El atacante abrió la lata en el minuto 62 con una jugada que él mismo inició y finalizó. Mediante una galopada, el '9' llegó a la frontal del área y marcó el primero de la noche con un derechazo ajustado al poste izquierdo.
Cuatro minutos después llegó el 2-0. La conexión balcánica lo fue todo para el Inter, que resolvió lo que en la primera parte se le había atragantado: su acierto. En esta ocasión, Perisic puso un centro ajustado milimétricamente y Dzeko se encargó de rematar con un cabezazo para superar a Trubin.
La afición 'nerazzurra' respiró tranquila, pero el partido no acabó. Los ucranianos consiguieron borrar al Inter en el tramo final del partido y estuvieron a punto de marcar cuando Dodo mandó un disparo al palo en el 82'. Mudryk no llegó al rechace por muy poco, pero un remate habría significado un gol prácticamente cantado para los visitantes.
Finalmente, el Inter de Milán consiguió embolsarse los tres puntos y dejó casi todos sus deberes hechos. Con esta victoria, tocará esperar a una victoria del Real Madrid ante el Sheriff para certificar de forma definitiva el pase a octavos de final. El Shakhtar Donetsk, por su parte, quedará cuarto en el Grupo D pase lo que pase en la última jornada.