El Gimnástica logró tener un éxito doble en la cita con el Mirandés. Gracias a estos tres puntos, el equipo logró alejarse aun más del descenso y, a su vez, dejar de ser el peor equipo a nivel local de toda la Segunda División de España.
"Hasta ahora no habíamos tenido un partido tranquilo y el equipo se lo merecía. Comenzamos bien, pero ellos se encontraron con un gol tras un saque de banda. Pero el equipo fue maduro, algo que veníamos pidiendo, y brindamos a la afición una buena victoria", afirmó Xavi Molina.
Los jugadores del Nástic festejaron los cuatro goles anotados al Mirandés y ya miran con otra cara el próximo partido ante el Getafe.
"Lo más importante es ayudar y que el equipo gane. Cada vez que me dan minutos intento responder de la mejor manera. He entrenado muy fuerte para tener minutos, poder rendir y es lo que estoy haciendo", completó Zahibo.