El equipo rojiblanco saltó al césped del estadio Vicente Calderón con uñas y dientes, pues el acercamiento a la tercera plaza de LaLiga estaba en juego. El Sevilla no pudo controlar uno de los mejores partidos del Atlético en lo que va de temporada e incluso el propio Simeone lo afirmó en la rueda de prensa posterior a la finalización del choque.
Pero en el Manzanares, la polémica hizo acto de presencia. El colegiado Gil Mazanano pitó un libre indirecto en favor del Atlético debido a un resbalón de Rami. De esa falta llegó el cabezado de Diego Godín que se coló en las redes de Sergio Rico.
En el descanso, precisamente en el túnel de vestuarios, Nasri intentó explicarle a Sampaoli y el propio Rami la razón de la falta que había concedido el mandamás de la cita: "Me ha dicho que es juego peligroso y es la primera vez que lo veo en mi vida", afirmó.
El reglamento dice que el juego peligroso es toda acción que ponga en peligro de lesión a cualquiera de los futbolistas que protagonicen la jugada. Además, la norma incluye que también se debería pitar falta si un adversario no puede jugar el balón por miedo a lesionarse o lesionar.
La falta fue indirectiva y los jugadores más altos del Sevilla no se encontraban en posición defensiva, por lo que pilló completamente desprevenido a un equipo que no logró frenar el ímpetu de Diego Godín.