Nunca una eliminatoria de Champions hizo tanto bien a un equipo. Y es que la Roma parece otro equipo tras eliminar al Barcelona en los cuartos de final de la máxima competición europea.
Con la mirada en el choque de semifinales ante el Liverpool, los romanos no podían descuidar su visita a un SPAL que se jugaba la vida en la lucha por salvarse de la quema. Y no decepcionaron.
Con un once que alternaba titulares y jugadores menos habituales, los 'giallorossi' se impusieron al SPAL sin la necesidad de que Dzeko, De Rossi o Florenzi tuvieran que participar en el choque.
Un gol en propia puerta de Vicari en la primera mitad encarriló el partido para los visitantes, que vieron cómo por fin Schick se estrenaba en la Serie A y empezaba a justificar su fichaje.
El checo haría el 0-3 con un perfecto cabezazo y también participaría en el 0-2, que llegó tras una volea con efecto del belga Nainggolan que pareció rozar a última hora Schick.
La última media hora, con la lesión de Meret en los locales, sirvió para que el equipo de Di Francesco contemporizara y se llevara tres puntos que, si bien no eran los más importantes de la semana, sí que sitúan al conjunto romano más cerca de la próxima Champions.