El Inter disfruta de las últimas jornadas de campeonato. El campeón ya tiene en el bolsillo el título liguero y sus compromisos son un mero trámite, pero sigue tumbando a los rivales que pasan por delante.
Ahora fue la Roma, que sucumbió en el Giuseppe Meazza por 3-1 en un encuentro que vivió hasta tres goles en la primera mitad.
Los 'nerazzurri' pusieron la directa en 20', intervalo de tiempo suficiente para ponerse con 2-0 gracias a los goles de Brozović y Vecino. Los romanos contestaron rápido y recortaron distancia gracias a Mkhitaryan en el 31'.
El encuentro no volvió a disfrutar de chicharros hasta el añadido de la segunda mitad, pero la imagen del duelo la protagonizaron Antonio Conte y Lautaro.
Tal y como captaron las imágenes de la retransmisión, tanto el técnico como el argentino se recriminaron a voces en la zona técnica. El futbolista hasta desahogó su ira pegándole una patada a una botella que había por su camino. Y el italiano, lejos de ser una persona tranquila, enfureció por su actitud.
Entretanto, el cuadro capitalino no fue capaz de marcar el segundo para igualar la contienda y Lukaku, en el 90', hizo el 3-1 definitivo.