Se puso muy de cara para la Roma el partido, pues El Shaarawy forzó un penalti a los dos minutos que transformó Perotti.
Pero la alegría duró muy poco a los romanos. En el '10 Zeman puso un balón para que Bakos pusiera el empate en el marcador.
La Roma tomó la iniciativa, si es que se puede decir que la hubiera soltado en algún momento, y comenzó a buscar el gol, pero sin acierto.
Fue superior durante el resto de la primera mitad y durante toda la segunda, pero no había modo. El Viktoria no cedió un un espacio y los que concedió no los aprovechó la Roma.
Al final, empate a uno que sabe a muy poco a uno y bastante a los otros.