Apenas 179 minutos de juego le han bastado a Daniele Verde para conquistar al aficionado medio de la Liga. El italiano, cedido por la Roma en Pucela, se ha convertido en uno de los mejores hombres del último mes y lo ha hecho en parte gracias a su excepcional golpeo de balón.
Aunque tuvo participación con el Valladolid en las tres primeras jornadas, una inoportuna lesión le tuvo al margen y no fue hasta la décima jornada, ante el Espanyol, cuando despertó de su letargo.
Ante los 'pericos', entró a poco más de un cuarto de hora del final y, en pleno añadido, anotó un golazo de falta directa para salvar un punto. Su semana de gracia no acabaría ahí, pues en Copa, ante el Mallorca, consiguió un doblete con dos nuevos disparos imparables desde fuera del área en el que hasta ahora ha sido su único encuentro como titular.
En el Santiago Bernabéu, contra el Real Madrid, su tiempo de juego sobrepasó los 20 minutos, aunque no tuvo demasiado impacto, y de nuevo ante el Eibar entró desde el banquillo para rozar el gol con dos golpeos con mucha clase que salieron rozando el palo de la portería de Riesgo.
Tras ser convocado con Italia Sub 21 el futbolista, todavía propiedad de la Roma, mostró sus deseos de seguir en la ciudad del Pisuerga. "Espero que lo antes posible me digan que soy propiedad del Real Valladolid, es algo que me gustaría mucho", detalló el futbolista en su país.
"Me gusta mucho España, el fútbol y su gente. En vacaciones, siempre he venido a Madrid o a Ibiza. Mi sueño es vivir aquí y el Valladolid es el primer equipo al que he llegado, así que ya no me importan los demás. Espero que me compren", insistió Verde en declaraciones recogidas por 'TMW'.
Tras deslumbrar en sus primeros compases en la Liga, a Verde ya sólo le queda encontrar estabilidad en el Real Valladolid para aspirar a la titularidad. Algo que, dicho sea de paso, en el Pucela todos piden a voces.