Partido caldeado el que enfrentó a Racing y Sao Paulo en la tercera jornada del Grupo E de la Copa Libertadores. El choque acabó sin goles, pero acabó en polémica tras una jugada desafortunada de Benítez.
El centrocampista del 'Tricolor' saltó a disputar una pelota con Martínez, que ganó el esférico limpiamente y sin falta aparente. Sin embargo, el centrocampista del conjunto brasileño se dejó caer al suelo y con gritos de dolor para hacer creer al árbitro que se había llevado un golpe del rival.
Tras esto, todo el banquillo de Juan Antonio Pizzi saltó enloquecido a protestar la impunidad de la jugada y eso llevó a una pequeña tangana, que a punto estuvo de llegar a mayores. Por suerte, solo se quedó en un par de empujones y se pudo continuar el partido.