Y es que la 'Vinotinto' lo tuvo muy claro: parar a Messi era el objetivo. Y lo consiguió. Maniató al '10' marcándolo con tres, cuatro y hasta cinco defensas cada vez que cogía el esférico.
Esa atención que atrajó 'La Pulga' no fue aprovechada por ninguno de sus compañeros. Ni Dybala ni Icardi supieron sacar ventaja de la obsesión de la defensa venezolana en el astro argentino.
Una imagen que se repite partido tras partido. Y por la que la afición argentina ovacionó, a pesar del empate, a Messi tras el encuentro. Distino ángulo, misma lectura:
Messi contra todos. pic.twitter.com/F6jIAYi7K8
— Messiología (@Messiologia) 6 de septiembre de 2017