La UEFA ha decidido rebajar los castigos establecidos a Manchester City y Paris Saint-Germain por los grandes gastos que originaron en lo relativo a fichajes y salarios, rompiendo los límites marcados por la normativa denominada como Fair Play financiero.
La decisión ha sido tomada tras que los clubes "alcanzaron varios objetivos para cumplir con el punto de equilibrio", según lo explicado por la junta de control financiero de la UEFA. "Bajo una estricta supervisión y deben cumplir aún con los objetivos para llegar al punto de equilibrio, por lo que seguirán sujetos a algunas limitaciones en 2016", concluyó el comunicado.
Esta organización fue creada en el año 2010 para evitar que los propietarios de los clubes inyecten dinero sin límite y adulteren la competición. Los clubes no pueden gastar más de lo que generan, salvo en algunos casos.