La UEFA ha reducido esa capacidad a los 64.000 espectadores. Se pondrán a la venta, sin embargo, sólo 41.500 entradas. Cada uno de los finalistas recibirá 18.000, y sólo habrá 5.500 para el público general.
El resto, más de 20.000, se las reserva la UEFA paras su uso y disfrute personal. Los precios de las entradas oscilarán entre los 69 euros de la más barata, a los 449 de la más cara, aunque en la reventa se dispararán los precios a niveles astronómicos.
No habrá VAR en la final de Cardiff, o no está previsto su uso, aunque sí se utilizará el 'ojo de halcón'. Sin embargo, las últimas polémicas arbitrales podrían llevar a la UEFA a tomar una drástica decisión al respecto.