Fue en la temporada 2014-15, cuando el equipo estuvo muy cerca de ascender a la Premier League. El principal protagonista fue Matthew Benham, el propietario del club en aquel entonces, un empresario que había triunfado con una iniciativa en apuestas deportivas gracias a la estadística. Un modelo que quiso aplicar en el Brentford.
El entrenador era Mark Warburton, un ex agente de bolsa que era el encargado de preparar las sesiones basándose en los ideales del máximo dirigente. Las matemáticas comenzaron a tomar un papel protagonista en el conjunto inglés. Y con buen resultado.
La idea era clara: marcar un objetivo en la temporada basándose en una ecuación matemática. Si no se cumplía, realmente es que lo que fallaba era el factor humano y se debía reemplazar, según recogía hace unos años 'AS'. También se evaluaba a los futbolistas por sus estadísticas: un porcentaje de aciertos y fallos en cada acción. Los ataques seguían el guion con el que les sería más fácil marcar.
Finalmente, el Brentford se quedó a las puertas de la Premier League esa temporada, llegando a rozar el sueño del presidente. Eso sí, pudo presumir de haber podido trasladar su modelo de negocio al mundo del fútbol.
Ahora, algunos años después, el Brentford tiene la opción de meterse en los cuartos de final si logra pasar por encima del Swansea City. El equipo se identifica con las abejas, como canta su propia afición con el 'Here we go, come on yu bees', tal y como se puede ver en su propio escudo.