El '11' azulgrana lo tiene claro, quiere olvidar el año pasado y centrarse en demostrar al Barça que su fichaje fue un total acierto y que su sitio está en el Camp Nou, y no va por mal camino el galo.
Hace poco más de un año que una lesión le hizo entrar en una espiral de críticas y malos momentos, una temporada que seguro que Dembélé borraría de un plumazo si pudiera. Su poca continuidad en las filas 'culés' le hizo quedar fuera del once de Deschamps en el Mundial.
Pero la transformación del joven francés es clara y ya nadie se acuerda de la campaña pasada. El gran arranque de temporada de Ousmane Dembélé ha hecho disipar todas las dudas que había sobre él.
Si el curso pasado logró anotar cuatro tantos y repartir siete asistencias, esta campaña ya ha superado su casillero goleador y suma cinco. Dos meses para pulverizar sus registros de toda una temporada.
Sus goles, además, han sido importantes, pues han servido para dar la victoria al equipo en más de una ocasión, como fue el caso de la pasada jornada liguera ante la Real Sociedad.
En el regreso de la Champions, Dembélé también aportó su granito de arena con un auténtico golazo. El francés demostró que sigue en estado de gracia, haciendo que las críticas hayan dejado paso a los elogios.