Este Barcelona-Madrid será interesante desde lo táctico, sin duda. Los analistas de ProFootballDB han analizado las pizarras de Ronald Koeman y Zinedine Zidane, que por primera vez se ven las caras siendo ambos responsables de los equipos azulgrana y blanco, que antaño defendieron como futbolistas.
Una de las claves a tener en cuenta será, sin duda, la escasa contribución goleadora del Real Madrid, derivada de un declive notorio de su estilo de juego. Por un lado, es evidente que los blancos han perdido su sello de identidad en fase defensiva: la presión alta, su secreto para realizar un tramo final de campeonato excelso y alzarse con el título de Liga. Sin esa capacidad, las ocasiones y goles rivales se han sucedido sin remedio.
El 'nuevo' Barcelona se ha reencontrado con la verticalidad perdida el curso pasado con Ernesto Valverde y Quique Setién. La vigilancia sobre los movimientos de Lionel Messi -'spoiler alert'- debe ser extrema, ya que Ansu Fati o Philippe Coutinho, que han empezado la temporada como un tiro, atacarán sin piedad los espacios que cree el argentino. De ahí la importancia de que el Real Madrid vuelva a defender en bloque tras perder el balón.
Reactivar su capacidad de presionar arriba va de la mano de esta premisa, especialmente después de haber comprobado lo peligrosos que se muestran los culés en las transiciones y al distribuir balones en profundidad entre líneas. Las internadas ofensivas de Ferland Mendy obligarán a Carlos Casemiro y Fede Valverde a hacer un esfuerzo extra en defensa y en las ayudas a Kroos.
Sólo el entrenador francés conoce exactamente el porqué de este bajón de rendimiento atrás, acompañado también de un ritmo de juego lento en la zona de creación. Las circulaciones de balón han pasado a ser más horizontales de lo habitual, careciendo de profundidad. Sólo Karim Benzema y Vinícius Jr. han conseguido por momentos inspirar a los suyos, generando espacios entre líneas que carecen de sentido, obviamente, si la pelota no llega.
Será la banda izquierda, la de Mendy y Vinícius Jr., la que acapare el grueso de las acciones ofensivas del Real Madrid. El desparpajo y la personalidad del brasileño, unidos a las peligrosas incorporaciones del francés, se erigen como una de las bazas más importantes de Zidane para hacer daño a la línea defensiva culé. La calidad de Benzema es otro argumento de peso, aunque de poco servirá si Kroos y Modric no logran hacer distribuir el balón con la velocidad suficiente.
Lo que ocurrirá en banda derecha ante la ausencia de Dani Carvajal sigue siendo una incógnita. Nacho Fernández parte como opción lógica a ocupar su puesto, pero su perfil más defensivo y la probable inclusión del uruguayo Valverde en el once titular -llegador, sí, pero no jugador exterior precisamente- convierten ésta en una vía prácticamente muerta a la hora de crearle problemas al Barcelona.
En lo anímico, el llamado 'efecto Ramos' ha quedado patente con la derrota ante el Shakhtar Donetsk. De los once partidos que se ha perdido el andaluz en los últimos cinco años, los merengues sólo han ganado tres. El capitán, un estandarte para el vestuario, ejerce una palpable influencia sobre unos compañeros cada vez más faltos de gasolina. Su posible ausencia en el 'Clásico' supondría un duro golpe para sus compañeros más fatigados, como Luka Modric.
A sus 35 años, el croata sigue perdiendo a pasos agigantados la chispa que le hacía marcar diferencias. Su apagón ha obligado a Zidane a rodear a su timonel, Toni Kroos, de piernas frescas como las de Fede Valverde y Carlos Casemiro. Pese a ello, está claro que al alemán necesita a su mejor aliado al 100% para hacer funcionar la sala de máquinas del conjunto madridista.
No se pueden obviar, sin embargo, las grandes actuaciones protagonizadas por Thibaut Courtois, imprescindibles para que el Real Madrid sacase adelante la mayoría de los partidos disputados esta temporada. El belga debe volver a mostrar su mejor versión, tanto bajo palos como con los pies, si el equipo madrileño quiere sacar algo positivo del Camp Nou.
Desde el prisma del FC Barcelona, la perspectiva es diferente. Su principal arma esta temporada, su alta efectividad en la presión tras pérdida, es lo que convierte al equipo de Koeman en un potencial 'martillo pilón' para la dubitativa defensa blanca. No obstante, será atrás donde los catalanes deben estar especialmente atentos, pues aún les generan ocasiones fácilmente tanto en ataque posicional como en transición.
Las pobres actuaciones de Clément Lenglet y la alineación de Jordi Alba, que vuelve de lesión con la lógica falta de ritmo, harán que Koeman, con toda probabilidad, ordene a Frenkie De Jong ofrecer cobertura en el costado izquierdo. En tareas de mediocentro, Sergio Busquets ha recuperado buena parte de las sensaciones que había perdido en temporadas pasadas, volviendo a ser el eje del Barça.
October 23, 2020
Pero serán los delanteros, sin embargo, la primera línea de defensa ante la temible dupla de ataque del Real Madrid. Para evitar posibles contragolpes presionando tan arriba, Lionel Messi, Ansu Fati, Antoine Griezmann y Philippe Coutinho, todos ellos, deben trabajar el doble cuando alguno de ellos o los laterales pierdan la posesión en campo rival. La buena noticia para el entrenador neerlandés es que, de momento, sus pupilos han acatado bastante bien su responsabilidad.
Si esta simbiosis mantiene su nivel como hasta ahora, el Barcelona podría tenerlo algo más fácil en zona de creación y finalización. Con un renovado Busquets, un De Jong aún verde pero ávido por reivindicarse y una defensa blanca que no encuentra su ritmo, la capacidad de encontrar espacios se multiplica. La rápida circulación de balón que aseguran ambos futbolistas puede hacer daño, mucho daño, al equipo de Zinedine Zidane cerca de su área, aunque todavía los 'culés' no han conseguido la velocidad de crucero pretendida, aun con las señales emitidas.
Salvo sorpresa mayúscula, Leo Messi será el falso '9' de un equipo dinámico, que pasa del 4-2-3-1 al 4-4-2 asimétrico de Koeman con bastante fluidez. Como mencionamos anteriormente, es de esperar que sus compañeros ataquen los espacios con verticalidad y profundidad al mínimo espacio que se cree. Ansu Fati es especialmente letal en estas situaciones y, por si fuera poco, está en racha. Las principales dudas recaen sobre Antoine Griezmann.
October 23, 2020
El estado de forma del francés dista mucho de ser el deseado por Koeman y por el propio jugador. La carga ofensiva de la banda derecha recaerá especialmente sobre él. En la izquierda, hasta que Alba ha entrado en la convocatoria, Sergiño Dest se enfrentaba a su primer 'Clásico' con la incertidumbre que rodea a todo joven talento cuando aterriza en una de las grandes ligas. Su rendimiento en Países Bajos es innegable, pero no deja de ser una referencia un tanto distante.
Por último, destacar el buen hacer de Neto bajo palos ante la enorme pérdida que supone la lesión de Marc-André Ter Stegen. El brasileño está cumpliendo con creces su papel como segundo portero, aunque su aportación al iniciar las jugadas del equipo con los pies dista mucho de la del alemán.