Con la Europa League en juego, Bandalosvski decidió aceptar un regalo que le llegó desde la grada: una cerveza. Ni corto ni perezoso, se agacho para coger la lata y le pegó un buen trago.
Lo que Bandalovski no sabía en ese momento es que se convertiría en el héroe del partido. En el 93', remató un saque de esquina con el que empató el partido y forzó la tanda de penaltis.
Eso sí, ya desde los once metros Bandalovski no podría darle la clasificación a los suyos.
Uno de los nuestros: tomó cerveza en pleno partido y convirtió un gol en la última jugada. pic.twitter.com/gvEw2MXdZW
— Diario La Nación (@LaNacionPy) 6 de junio de 2017