'AS' informó, haciéndose eco de medios locales, de la crítica situación económica por la que pasa Asamoah Gyan, que ha anotado 235 goles a lo largo de una carrera que le ha llevado por Udinese, Rennes, Sunderland o Shanghai SIPG. El ghanés, ahora en las filas del Kayserispor, está en la ruina.
El cuadro turco pasa por problemas de tesorería que impiden que Gyan pueda cobrar su nómina de forma continua. Sin embargo, el gran problema para el cuartofinalista del Mundial de 2010 ha estado en años anteriores. Actualmente, apenas cuenta con 600 euros en su cuenta corriente.
No puede mantener a su familia pese a que en su momento, allá por 2015, llegó a ganar más que estrellas mundiales como Bale o Neymar. Al firmar por el Shanghai SIPG, Gyan se aseguró un sueldo de aproximadamente 17 millones de euros, más de 300.000 euros a la semana.
En China estuvo temporada y media, por lo que le dio tiempo a aumentar la fortuna que ya de por sí disponía tras competir a gran nivel en potentes ligas europeas. Nada más lejos de la realidad, Gyan habría reconocido a su círculo más íntimo que ha malgastado todo su dinero.
Varios medios locales señalaros que el delantero no mantiene contacto con su esposa ni con sus tres hijos desde el mes de agosto, ya que no contesta a las llamadas por la compleja situación que vive. Tocó el cielo, ganó el dinero que jamás hubiera imaginado ganar, pero hoy en día Gyan está al borde de la más absoluta bancarrota.