El campeón de la Premier League está en crisis. Eliminado de la EFL y la FA Cup, ahora mismo el liderato le queda a siete puntos. Es más, es que actualmente mora fuera de los puestos de acceso a Champions (aunque con un partido menos). Dos son sus grandes lastres: las lesiones, que le han arrasado este curso, y los problemas para hacer gol.
Suena raro, pero el dato es contundente: el equipo de Klopp es, junto a a la SD Huesca, el único de las grandes ligas que aún no sabe lo que significa hacer un tanto en lo que va de 2021. Los tres encuentros que ha disputado ante Southampton (1-0), Manchester United (0-0) y Burnley (0-1) se saldaron con un solo punto. Sí marcó en el choque de FA Cup contra los 'red devils', aunque no le valió para nada (3-2).
Pero es que la sangría es mayor aún. Son cuatro encuentros consecutivos los que acumulan los 'reds' sin ver puerta en la Premier League. El último lo firmó Sadio Mané ante el West Bromwich Albion en el minuto 12. Desde entonces, son 438 minutos de sequía. Irreconocible. Que el Liverpool, aun así, sea el equipo más goleador del campeonato (37, empatado con el United, aunque con un partido menos) no solo es paradójico sino que incide en cómo ha bajado el pistón en los últimos meses. De hecho, estos últimos cuatro encuentros seguidos sin anotar han sido los únicos en que se quedó a cero en el curso.
Pura ironía teniendo en cuenta que el precedente anterior fue el 0-7 en campo del Crystal Palace. Pero no queda ahí el daño, es que en este tramo desde aquel brillante triunfo se ha dejado 12 puntos por el camino que están dejando a los de Klopp y los suyos en una posición delicada de cara a aspirar a lo máximo en la competición.
El duelo ante el Tottenham no será precisamente una prueba fácil para romper la tendencia. La sangría viene siendo una tendencia desde que la pandemia se instaló en el fútbol, puesto que en ese tramo ha hilado 20 victorias, 12 empates y 7 derrotas.
January 25, 2021