"La exigencia del Barcelona es inmensa. Acá cada tres días tienes que estar rindiendo un examen, no hay descanso, porque no te perdonan ni siquiera un partido malo", comentó, entre otras cosas, en charla con el diario 'Ovación'.
Por eso, es consciente de que cada día que pasa acerca más rápido el momento en que tendrá que decir adiós. "Ya lo dije hace tiempo, va a llegar un tiempo en que mi edad no me va permitir estar a la altura de lo que precisa el Barcelona para competir, pero mientras pueda, mientras tenga la fuerza que me traigan competencia es mucho mejor", comentó.
Ese es el motivo por el que no le molesta que el club "esté buscando o quiera traer otro '9". "No es nada extraño, es la realidad del fútbol", ahondó.
No obstante, le sacó la lectura positiva a ese nivel tan alto de evaluación continua: "Será mejor para mí porque me exigirá, será mejor para el club, porque se alimentará la competencia, y será mejor para el futuro porque podrán ir preparando a un futbolista con la ayuda de todos los grandes jugadores que tiene el Barcelona".
Con todo, Luis Suárez destacó su rendimiento como azulgrana: "No es fácil venir a jugar a un club como el Barcelona, adaptarse y ganarte tu lugar. Hay que valorar que yo llevo cinco años en el club conviviendo con la misma presión y siempre intentando responder de la misma manera".