Combate nulo en el Reale Arena. El Real Madrid 2020-21 arranca el curso con un empate a cero que quizá no haga justicia a lo visto sobre el césped. Pero, una vez más, el dominio y la posesión no se tradujeron en goles.
Las sensaciones en el fútbol no siempre son tenidas en cuenta. No son reales, al menos, para los datos y resultados, dos cosas determinantes en el mundo de la pelota. Pero sí fue real un 0-0 que trae de nuevo fantasmas del pasado pese a los méritos vistos sobre el césped. Al menos, sobre los primeros 70 metros del mismo".
El punto sabe mejor a la Real Sociedad, aunque también los locales pudieron rascar algo más en la primera parte.
Arrancó valiente el campeonato Zidane. No en vano, dejó en el banquillo a Casemiro para alinear un centro del campo de todo menos defensivo. Odegaard, Modric y Kroos lograron lo que quiso 'Zizou': balón y protagonismo. Pero ahí se atascó el equipo.
Rodrygo y Vinicius, de nuevo, mostraron más iniciativa que frutos. Sembraron y sembraron, pero apenas recogieron. Aunque con las internadas de los brasileños llegaron gran parte de las ocasiones de los blancos. Por su parte, Imanol alineó a un Aihen (no llegó Monreal) al que el '27' 'merengue' mareó hasta sacarle una amarilla... y de quicio. Oyarzabal e Isak debían liderar un equipo que se agarró más a la frescura de Barrenetxea y al ímpetu del incesante Portu.
No fue hasta el minuto 14 cuando apareció la primera mancha en un guante. Fue en el de Remiro, que detuvo un intento lejano de Benzema. Karim acabó mejor el curso en lo goleador de lo que ha empezado este. Y especialmente notorio fue en la mejor ocasión de su equipo.
Pasaban los minutos con un guion tan marcado como estéril. El balón era de los blancos, pero la Real avisaba en contragolpes y rápidas salidas. Los costados dieron aire al Madrid, pero no llegó de la banda ningún balón clave para la referencia en ataque. De hecho, tuvo que ser el portero rival el que abriese huecos para la ocasión del francés.
Remiro erró en la salida de balón y se lo regaló a Vinicius. Este fue más efectivo que de costumbre y pasó rápido a Benzema, que estaba por poco habilitado en el área. Regateó al meta el '9', pero cruzó en exceso (acabó su remate en saque de banda) con la zurda cuando era casi más fácil cualquier otro final para el 'thriller'.
Se animaron los últimos minutos del primer tiempo. Tanto que fueron el nido de las mejores ocasiones del partido. Tras la del galo, él mismo tuvo otro remate desde la frontal que se marchó fuera antes de que Isak perdonase una de esas acciones que se te repiten en la mente mientras tragas horas y horas de techo en casa.
El sueco se plantó solo ante Courtois. El belga volvió a demostrar su valía y su importancia en este Madrid al sacar un pie clave para evitar el tanto del delantero de la Real. Cruzó bien el atacante, pero mejor reaccionó el meta. La bola, tras unos rechaces, volvió a un Isak que mandó el segundo intento fuera al intentar buscar el segundo palo.
Más dominio, menos ocasiones, mismos goles
El segundo tiempo empezó con una clara ocasión para la Real Sociedad. Oyarzabal, hasta ahora desaparecido, habilitó a Barrenetxea, que se pasó de cruzado en su remate o se quedó corto en cerrar su pase de la muerte. Sea como fuere, su remate de primeras con la zurda se paseó cerca del palo de Courtois.
Tras esta ocasión, de nuevo dominó el Madrid. E incluso con más balón aún. Pero se repitió la misma historia del primer tiempo. Y nadie puede decirle a Vinicius que no lo intentó o a Benzema que no apareció. O a Rodrygo, que siguió echando a temblar a un Aihen que mejoró con los minutos. Pero la voluntad se quedaba en eso en la frontal del área. En el muro de la zaga realista.
Carvajal, sobre la hora de partido, probó de lejos a un Remiro un tanto inseguro que blocó en dos tiempos tras una mala salida en un centro anterior. De nuevo probó el Madrid desde lejos, aunque Kroos no presumió de la puntería que le caracteriza y mandó desviado un zurdazo desde la frontal.
Debutó Silva en la Real con algo menos de media hora por delante. Y Zidane refrescó su once con Casemiro, Valverde y Marvin, un canterano que se durmió en el área cuando el fútbol le puso en bandeja una de debut soñado. Vinicius le dio la bola en el área en el 78', pero amagó demasiado y no llegó a la cita con la noche perfecta.
La recta final dejó al cuadro 'merengue' en campo contrario, pero a los de Imanol amenazando al contragolpe. Mendy, que tuvo mucha presencia en ataque, y Vinicius dejaron dos remates sin apenas peligro antes de que Silva rozase su primera hazaña como 'txuri-urdin'.
El canario pudo romper el 0-0 en el 88' con un zurdazo marca de la casa desde la frontal, pero fue Varane el que, con la zona más delicada, salvó la ocasión.
En el añadido, la bola estuvo más en el área que los motivos del Madrid para un gol que ya nunca llegará. Arranca el curso con razones para ser optimistas el cuadro de Zidane, pero de nuevo el último pase y, por ende, el gol abandonan a unos blancos que en momentos como estos se acuerdan de Asensio o Hazard.
Por su parte, la Real suma su segundo empate seguido y, pese al rival, las numerosas bajas y a la validez del punto, debe subir alguna marcha para llegar al nivel del curso pasado.