Después de pelear por el ascenso la temporada pasada, el Numancia tiene la mirada fija en repetir o incluso mejorar lo que hizo en la campaña 2017-18.
El listón está tan alto que la afición no quiere que los suyos se relajen y no dudaron en pitarle durante la eliminatoria de Copa del Rey contra el Sporting.
Nada más concluir el choque, Garai se quejó amargamente de la actitud de la grada: "No entiendo y me preocupa la predisposición de la gente desde el primer minuto. Me da igual lo que haya pasado en el juego, no me gusta nada que la gente murmulle. Cero. No me incomoda, pero no quiero que mis jugadores sientan eso, ni lo merecen", comentó.
Por último, el técnico vasco analizó el partido. "Hemos sido mejores, dos errores que nos han penalizado, pero hemos sido superiores en muchas fases del partido. Los goles a balón parado no me preocupan porque han sido mala suerte, y el otro nos adelantan", concluyó.