El primero, y uno de los detonantes, fue la eliminación en manos del Barcelona por el famoso 6-1 que el cuadro azulgrana le endosó a su equipo tras haber ganado la ida 4-0. Eso le llenó de impotencia porque, al fin, se veían capaces de hacer algo grande... pero acabaron igual que siempre.
El segundo, el cual va en relación que el anterior, es que Verratti fichó por el PSG con la intención de ganar títulos importantes y ser reconocido en el mundo (más de lo que es). Pero el centrocampista se ha encontrado contra un equipo que nunca le ha sabido hacer bien cara a los cuadros 'top' de Europa. El PSG sólo ha reinado en Francia... y este año no ha hecho ni siquiera eso.
Por último, y más importante, ya que es un motivo que no tiene marcha atrás, según afirma 'Le Parisien', el jugador se desanimó cuando empezaron a salir jugadores que fomaban parte de su círculo de amistades y a los que, además, él consideraba como piezas clave. Zlatan, Lavezzi y Sirigu abandonaron el equipo recientemente y debido a ello el jugador perdió aspiraciones. Justo las que quiere recuperar en Barcelona.