Los abogados de Nicolás Leoz piden el rechazo de la extradición

Leoz, de 88 años, está en arresto domiciliario en Asunción desde que fue acusado junto a otros altos dirigentes del fútbol de ser parte de una trama de corrupción en la FIFA.

La justicia de Estados Unidos, que investiga esta trama, solicita su extradición para que pueda ser juzgado en ese país.

El abogado Ricardo Preda, uno de los defensores de Leoz, explicó a Efe que los abogados presentaron este martes una solicitud al juez Otazú para pedirle que rechace el pedido de extradición a Estados Unidos del exdirigente futbolístico.

Argumentan que la acusación de la justicia estadounidense se basa en un delito, el de soborno privado, que no está contemplado en la legislación paraguaya.

Para demostrar la falta de regulación del soborno privado en Paraguay, los abogados citaron informes en los que Naciones Unidas recomienda a Paraguay que incluya esta figura como tipo penal en su legislación.

También aludieron en su escrito de argumentación a las declaraciones del Fiscal General del Estado, Javier Díaz Verón, y del fiscal anticorrupción Federico Espinoza, sobre la ausencia del delito de soborno privado en la legislación paraguaya.

Casi 130 millones de dólares fueron desfalcados o transferidos en operaciones sospechosas desde cuentas de la Conmebol entre 2000 y 2015, cuando presidieron el organismo Nicolás Leoz y el uruguayo Eugenio Figueredo, según los resultados de una auditoría forense difundidos a finales de abril en el 67 Congreso ordinario de la entidad, celebrado en Santiago de Chile.

La investigación, realizada por una consultora y un despacho de abogados, reveló la existencia de transferencias bancarias directas por 26,9 millones de dólares desde la Conmebol a cuentas de Leoz, que presidió el organismo entre 1986 y 2013.

Leoz, que también fue miembro del Comité Ejecutivo de la FIFA, es uno de los implicados en la investigación emprendida por Estados Unidos, en colaboración con la justicia suiza.

Siete directivos de la FIFA fueron detenidos en mayo de 2015 en Zúrich (Suiza) a petición de Estados Unidos, donde una fiscalía de Nueva York investiga presuntos sobornos y comisiones en el seno de la FIFA desde principios de los noventa hasta la actualidad.