El primer problema es Cristiano Ronaldo. El luso está muy lejos de su mejor versión. Sólo ha logrado un gol en Liga y, aunque en Champions sí está acertado, su bajón ha contribuido a la diferencia de ocho puntos del Barça sobre los blancos.
Además, sus declaraciones sobre la plantilla, a la que cree que le falta experiencia, tampoco han ayudado a mejorar un ambiente que sigue muy cargado.
El segundo dolor de cabeza de Zidane se puede resumir en un dato. Ante el Tottenham, el Madrid corrió 11 kilómetros menos que su rival, algo que evidencia la falta de actitud e intensidad en ciertos encuentros.
Jugador clave como Marcelo, Kroos o Modric componen el tercer aml al que se enfrenta el técnico. Los tres han formado parte de la base del equipo, además, con papeles protagonistas. Sin embargo, su nivel ha bajado considerablemente y preocupan estadísticas como las pérdidas de balón. El brasileño ha desaprovechado 45 posesiones en los dos últimos choques; 28 eel alemán y 26 el croata.
Por último, una de las piedras más grandes en el camino del Madrid: la falta de gol. A estas alturas de la pasada temporada, los del Bernabéu contaban con 20 goles más, una cifra que, de haberse logrado, habría arreglado más de un tropiezo.