Estos jugadores podrían haber visto su último partido como jugadores del Barcelona desde la grada, ya que el club va a intentar 'colocarlos' en este mercado estival. Ninguno jugó en la final de Copa, ya que Luis Enrique gastó sus cambios con Mathieu, Rafinha y Sergi Roberto.
El peor caso es, sin duda, el de Bartra. El defensa acaba el curso con la convicción de que para poder seguir creciendo tendrá que salir del Barça. Por lo menos, se lleva la alegría de que Del Bosque lo ha incluido en la lista de los 25 preseleccionados para la Eurocopa.
La temporada de Adriano y Thomas Vermaelen han estados marcadas por las lesiones y su aportación ha sido muy limitada. La directiva blaugrana intentará buscarles una salida, ya que así liberarían plazas y aligerarían sueldos.
En el caso de Sandro Ramírez, lesionado en la recta final del curso, recibió el lata para la final de Copa. Su destino apunta a la Premier.
Más raro ha sido el de Douglas Pereira. Su fichaje ya fue extraño de por sí y el recorrido del lateral brasileño en el Barcelona ha estado marcado por las lesiones de larga duración y sus pobres, además de pocas, actuaciones en el terreno de juego. También a él intentarán buscarle equipo.