La 'Cuidad de los Rascacielos' es algo más que una imponente mole de hormigón, acero y cristal. Es una gran ciudad en la que perderse, y los futbolistas del Barcelona no perdieron la oportunidad de vivirla, aunque sea una sola tarde.
Eso sí, cada uno, a su ritmo. Así, Messi y Suárez aprovecharon para hacer una visita familiar, con sus respectivas mujeres e hijos, otros se fueron con sus compañeros de vestuario como colegas.
No fueron un grupo, en el autobús del equipo, porque el tráfico de grandes vehículos está regulado en Nueva York, y eso les obligaría a volver antes del anochecer.
Por eso cada uno ha ido prácticamente a su aire. Como no tienen que volver al hotel de concentración hasta la noche, aprovecharán para cenar en Manhattan antes de hacer el camino de vuelta.