Después del parón de las Ligas por culpa de los compromisos de las selecciones, el Inter de Milán volvió al trabajo para tratar de preparar su próximo compromiso de la Serie A.
En una de las sesiones, los jugadores aprovecharon el descanso para recuperar energías. Sin embargo, el tiempo de tranquilidad se convirtió en un momento de rebeldía.
Icardi y varios compañeros se acercaron a Eder, que estaba tendido sobre una camilla, y le lanzaron huevos y harina por su 31 cumpleaños.
A Eder le tiraron huevos y harina por su cumpleaños. Nuestros jugadores son unos nenes todavía pic.twitter.com/v1eUkz9D51
— Inter Milán Arg (@InterMilan_Arg) 15 de noviembre de 2017